Los mayores piden ayuda a sus nietos.

La Asociación de Abuelas y Abuelos de España ha publicado una emotiva carta abierta dirigida a los nietos pidiéndoles ayuda ante la amenaza del coronavirus.

Comienza dirigiéndose a los más jóvenes

“Queridos nietos, perdonarme que os llame así sin ser familia vuestra, pero es que, de alguna manera, los que somos abuelos nos consideramos que lo somos de todos los que tienen las edades de nuestros nietos de sangre y os queremos como si realmente fuéramos vuestros abuelos”. Ha sido firmada por Francisco Muñoz, presidente de la asociación.

La carta continúa…

…recordándonos que ellos han sido la generación que ha hecho todo de lo que disfrutamos hoy en día con su esfuerzo y dinero, cómo el hospital donde nacimos, el colegio donde nos educamos, las comidas que nos han nutrido etc. Están seguros que lo vamos a hacer incluso mucho mejor que lo hicieron ellos y que siguen ayudando a que así sea. “Vuestro éxito será nuestro éxito, vuestro triunfo será nuestro triunfo y para eso hemos hecho, estamos haciendo y seguiremos haciendo, mientras nos mantengamos en este mundo, todo lo que esté en nuestra mano para que viváis lo mejor posible y seáis lo más felices que se pueda ser”, afirman.

Los abuelos nos advierten

El número de contagios está aumentado de nuevo de una forma muy alarmante, siendo ellos los más perjudicados y los que más riesgo tienen.
Nos dicen que los contagios se están produciendo por no cumplir las normas, siendo el mayor número de casos entre jóvenes. En la mayoría de los casos de los jóvenes el virus les afecta mucho menos, pero pueden contagiarlo a cualquier persona que sí que tiene un riesgo alto y al que las consecuencias pueden ser terribles.

Por toda esta tragedia nos hacen una petición

“De abuelo a todos los que sois nietos, y queréis a vuestros abuelos: cumplid las normas, por favor. Usad la mascarilla, mantened la separación social establecida de metro y medio, lavaos las manos y, sabéis perfectamente porque sois una generación inteligente, lo que debéis hacer y no debéis hacer, sin que nadie os lo tenga que decir. Si todos lo hacemos durante quince días, el virus desaparecerá… o casi”.

La carta termina pidiéndonos que lo hagamos por el cariño a nuestras abuelas y abuelos y no porque nadie nos lo mande. Hagámoslo por ellos.