Las úlceras por presión son una lesión en la piel que aparecen con frecuencia en las personas mayores. Pueden variar desde enrojecimiento leve de la piel hasta daño grave en los tejidos, y en ocasiones infección, que se extiende al músculo y al hueso.
¿Cómo podemos prevenir las úlceras por presión en personas mayores?
Nuestros amigos de ConMuchoCuidado nos muestran una serie de recomendaciones para la prevención de úlceras por presión
Se debe revisar la piel por lo menos una vez al día.
Fíjese bien en las zonas típicas de presión: talones, glúteos, espalda, codos y parte posterior de la cabeza.
Evite la humedad de la orina, heces, sudor o supuración.
Cuando esto ocurra debe limpiar muy bien la piel, secándola luego con un paño suave a golpecitos, nunca frotando.
En pacientes que permanecen largo tiempo sentados:
Si es posible, es conveniente enseñarle a que se movilice cada 12-30 minutos.
Use dispositivos que disminuyan al máximo la presión: almohadas de latex, colchones anti-escaras (de aire, agua o latex), almohadas,
protectores de talones y codos, etc. (son materiales complementarios, no sustituyen nunca a los cambios posturales).
Quedan contraindicados los materiales con agujero central.
Mantenga la piel limpia y seca, pero bien hidratada.
Debe usar jabones que no irriten la piel. No utilice sobre ella ningún tipo de alcohol.
Hidrate con cremas que se absorban bien y zonas prominentes con aceites grasos hiperoxigenados o aceitosas, sin realizar masajes.
A los pacientes encamados:
Es necesario, cada 2-3 horas, moverles alguna zona, haciéndolo siguiendo un orden.
Procure mantener la alineación corporal para así distribuir el peso de manera uniforme.
Evite el contacto directo de las prominencias óseas entre sí, por ejemplo tobillos, rodillas, etc.
Evite el arrastre, si tiene que moverlo pida ayuda a otra persona para no arrastrarlo por la cama.
Si es necesario eleve el cabecero de la cama lo mínimo posible y durante el tiempo mínimo preciso.
Usamos cookies en nuestro sitio web para brindarle la experiencia más relevante recordando sus preferencias y visitas repetidas. Al hacer clic en "Aceptar", acepta el uso de todas las cookies.
This website uses cookies to improve your experience while you navigate through the website. Out of these, the cookies that are categorized as necessary are stored on your browser as they are essential for the working of basic functionalities of the website. We also use third-party cookies that help us analyze and understand how you use this website. These cookies will be stored in your browser only with your consent. You also have the option to opt-out of these cookies. But opting out of some of these cookies may affect your browsing experience.
Necessary cookies are absolutely essential for the website to function properly. This category only includes cookies that ensures basic functionalities and security features of the website. These cookies do not store any personal information.
Any cookies that may not be particularly necessary for the website to function and is used specifically to collect user personal data via analytics, ads, other embedded contents are termed as non-necessary cookies. It is mandatory to procure user consent prior to running these cookies on your website.
Recomendaciones para la prevención de úlceras por presión
Las úlceras por presión son una lesión en la piel que aparecen con frecuencia en las personas mayores. Pueden variar desde enrojecimiento leve de la piel hasta daño grave en los tejidos, y en ocasiones infección, que se extiende al músculo y al hueso.
¿Cómo podemos prevenir las úlceras por presión en personas mayores?
Nuestros amigos de ConMuchoCuidado nos muestran una serie de recomendaciones para la prevención de úlceras por presión
Se debe revisar la piel por lo menos una vez al día.
Fíjese bien en las zonas típicas de presión: talones, glúteos, espalda, codos y parte posterior de la cabeza.
Evite la humedad de la orina, heces, sudor o supuración.
Cuando esto ocurra debe limpiar muy bien la piel, secándola luego con un paño suave a golpecitos, nunca frotando.
En pacientes que permanecen largo tiempo sentados:
Si es posible, es conveniente enseñarle a que se movilice cada 12-30 minutos.
Use dispositivos que disminuyan al máximo la presión: almohadas de latex, colchones anti-escaras (de aire, agua o latex), almohadas,
protectores de talones y codos, etc. (son materiales complementarios, no sustituyen nunca a los cambios posturales).
Quedan contraindicados los materiales con agujero central.
Mantenga la piel limpia y seca, pero bien hidratada.
Debe usar jabones que no irriten la piel. No utilice sobre ella ningún tipo de alcohol.
Hidrate con cremas que se absorban bien y zonas prominentes con aceites grasos hiperoxigenados o aceitosas, sin realizar masajes.
A los pacientes encamados:
Es necesario, cada 2-3 horas, moverles alguna zona, haciéndolo siguiendo un orden.
Procure mantener la alineación corporal para así distribuir el peso de manera uniforme.
Evite el contacto directo de las prominencias óseas entre sí, por ejemplo tobillos, rodillas, etc.
Evite el arrastre, si tiene que moverlo pida ayuda a otra persona para no arrastrarlo por la cama.
Si es necesario eleve el cabecero de la cama lo mínimo posible y durante el tiempo mínimo preciso.
Para más información, descarga el documento de ConMuchoCuidado y no dudes en contactarles: Descarga Documento
Visita su página web: www.conmuchocuidado.es